La cardiopatía isquémica, la fibrilación auricular y la insuficiencia cardiaca con procesos muy prevalentes, en muchos casos asociados a la presencia de factores de riesgo y al envejecimiento de la población y con repercusiones no solo sanitarias, también del ámbito social, laboral y otros, que precisan un abordaje adecuado en cada momento a cada situación de las personas y sus familias.